Silvania Cundinamarca
Tierra de promisión
Sobre el municipio
Referencia:
Melo, C. (2013, 05, 02). Silvania Tierra de Promisión.Dr. William Mahecha Sásipa [Archivo de vídeo]. Recuperado de http://www.youtube.com/watch?v=uIBkQnQvqy4
Historia
Características del municipio
El municipio está ubicado en la cordillera oriental de los Andes, en la vereda de Sumapaz, por lo que debido a la temperatura (20°C) y humedad (precipitación promedio anual es de 1653 mm) se han creado las condiciones adecuadas para ecosistemas que permiten el crecimiento de musgos blancos, líquenes, y hongos (Figura 3-4). Tales ecosistemas permiten que habiten especias como búhos, azulejos, osos perezosos, garzas negras, murciélagos, entre otros (Ballén, Espinosa, & Melo, 2014, pp. 2-22).
Con relación a su territorio, Silvania posee 16.293 hectáreas de las cuales el 59.06% corresponde a una zona de bosque húmedo y el 40.94% restante corresponde a: las tres veredas que conforman el municipio, a los 54 sectores rurales, al sector recreacional y al casco urbano que cuenta con ocho barrios (Ballén, Espinosa, & Melo, 2014, p. 3). El casco urbano está dividido en dos núcleos: el A y B. Por un lado, el núcleo A con aproximadamente 125 hectáreas que está compuesto por los barrios Kennedy, Centro, el Progreso, los Puentes, Pinares del Rio, los Andes, Alto de la Virgen, y Molino Rojo. También, en este núcleo se encuentran las instituciones educativas la Institución Educativa Sumapaz; Jardín Infantil La Pradera y Los 7 Enanitos; la Universidad Uniminuto que cuenta con 3 carreras profesionales; y el Sena que constantemente desarrolla programas (Ballén, Espinosa, & Melo, 2014, p. 25). Por otra parte, el núcleo urbano B es el sector turístico y recreacional con 323 hectáreas (Alcaldía de Silvania, 2014, párr. 8). En ese núcleo está la calle turística que consta de casas de expendio de bebidas y comidas (Alcaldía de Silvania, 2014, párr. 4).
En el año 3500 antes de la era actual, el hombre del paleolítico dejó de ser nómada y se convirtió en sedentario, y pasó de las cavernas a cobertizos y chozas. El desarrolló la agricultura con el cultivo del maíz base de su alimentación, y la ganadería con la domesticación de venados de cola blanca para el aprovechamiento de la leche, carne, huesos y piel. En el año 600 de la era actual, los muiscas provenientes de Centroamérica llegan a Sumapaz y se convierten en la Nación Sutagao (Ballén, Espinosa, & Melo, 2014, p. 43).
Los sutagaos o hijos del sol eran cazadores y agricultores, su economía se basaba en el intercambio de productos agrícolas, explotación de sal y esmeraldas. Ellos jerárquicamente se dividían en jefe cacique, brujo, guerreros, y mujeres quienes vestían guayucos y eventualmente mantas atadas al hombro (Figura 2) (Castañeda, 2012, párr. 4-5). Con respecto a Silvania existieron cuatro pueblos de sutagaos: Ciénaga, Subia, Chiayzaque y Uzathama, los cuales se vieron afectados por la llegada de los españoles en 1.537, quienes someten a los aborígenes y en 300 años europeizaron su cultura y vida social, dando paso a los mestizos de la región (Ballén, Espinosa, & Melo, 2014, p. 51).
La tierra de los sutagaos que fue uno de los primeros botines que lograron los blancos, se fue convirtiendo en hacienda real del Nuevo Reino de Granada. Después de unos años, la hacienda real se entregó en latifundios a particulares y entidades religiosas, que fueron subdividiendo en lotes, donde algunos adquirieron varios de ellos y organizaron sus propias haciendas, como lo hizo don Juan Gerónimo Lévano quien conformó la hacienda El Chocho en 1832. En esa hacienda aún existían indígenas y los españoles habían traído esclavos negros para el trabajo, lo que hizo que ya no fueran solo mestizos sino que apareciera la población zamba y mulata (Ballén, Espinosa, & Melo, 2014, p. 50).
Tiempo después, el “municipio de Silvania se funda, en 1936, por Ismael Silva en la hacienda Chocho, la cual se convirtió en un símbolo de revolución agraria, de modelo de parcelaciones, y en cuna del primer partido agrario” (Consorcio ingenieros y arquitectos Ltda., s.f., p. 7). Lo anterior, debido a que la hacienda El Chocho es adquirida en 1.889 por don Ángel María Caballero, quien para hacerla productiva, trae una amplia población de campesinos del oriente cundinamarqués y del departamento de Boyacá (Ballén, Espinosa, & Melo, 2014, p. 51). Tal evento ocasionó en 1928 la formación de sindicatos agrarios, en 1934 la parcelación de la Hacienda Chocho, y en 1935 la posesión de un terreno abierto en un claro de monte señalado del Chocho para sede del pueblo (Silvania) que iba a fundar Ismael Silva (Alcaldía de Silvania, 2014, párr. 6).

